Historia de las niñas y los niños trabajadores -en las calles de Cajamarca-

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Reporte de la entrevista de Cussi Punku (https://cussipunku.org/es).
video(14min.)→Historia de las niñas y los niños trabajadores -en las calles de Cajamarca-

En julio de 2019.

Volamos a Cajamarca, a una hora y veinte minutos al noreste de Lima, la capital de Perú, donde había estado nublado todo el día.

Cajamarca está ubicado entre las montañas de Los Andes, donde el clima cambia rápidamente de lluvia al sol, y el aire es claro y el cielo se siente cercano.

Nos saludó la señora Celi, un miembro del personal de MANTHOC Cajamarca. 
Ella y su hermana Adela, que es directora, están a cargo de las actividades y la administración de este lugar.

*MANTHOC:Movimiento de Adolescentes y Niños Trabajadores Hijos de Obreros Cristianos 

Las actividades de MANTHOC Cajamarca son únicos, administran un hostal para ganar sus fondos.
Hay un comedor y unas salas de reuniones, por eso aquí es una base para actividades infantiles. Está registrada en Booking.com, entonces los turistas vienen a alojarse.

También reciben regularmente los voluntarios de Alemania y Bélgica.
Los edificios son coloridos y lindos, y las plantas del jardín están bien cuidadas, así que se siente muy agradable.

Encima del cerro de Cajamarca hay una gran piedra y  dicen que el rey  Inca se sentaba allí. La vista desde aquí tiene el contraste del verde de las montañas y los colores cálidos de las casas.
Hay aguas termales y ruinas Incas en las afueras de la ciudad, entonces los turistas visitan Cajamarca.

En la ciudad de Cajamarca hay muchos taxis, moto taxis, y microbuses (combi). Podemos tomarlos en el vecindario por 1 Sol/. Así que la gente los usa frecuentemente.

Hay  un joven que le encanta caminar cantando con los ritmos ágiles.
Isaías, de  19 años de edad.
Él es el protagonista de este vídeo.

Canta Rap con su corazón apasionado, llevando un radio bajo el brazo.

”Hay señores que a los demás, se creen superiores;

Hay vidas que se marchitan como las flores”

”El Perú no va a cambiar porque lo quieres así; 

¿quieres que el Perú cambie? . . .  empieza por ti”

Isaías piensa en los problemas reales en  Cajamarca y Lima, y cómo puede cambiarlos.
Él escribe sus letras,  hace expresiones y las canta a través de su Rap.

En Cajamarca hay mujeres, niños y niñas que venden  verduras en las calles.

Como en este video, la familia de Liz que alquilan su aparcamiento, o la familia de Daniel que trabaja en los molinos de granos, muchas personas hacen su trabajo con  sabiduría. Sin embargo, ganan poco dinero, y los niños y niñas siempre van también a trabajar.

Depende de la familia, los padres piensan que sus hijos  e hijas no necesitan la educación  sino  que tienen que trabajar. Entonces, muchos niños y niñas no pueden entrar a la escuela, aunque tienen la edad para el primer grado. Además, aunque ellos pueden  ir a la escuela después de algunos años, frecuentemente no logran entrar a la escuela pública.

MANTHOC Cajamarca administra una escuela primaria, y aquí los niños y niñas de todas las edades,  pueden entrar y aprender, desde el primer grado. Van a esta escuela más niños y niñas que lo esperado, por eso es difícil preparar la comida escolar.

Esta foto muestra una clase especial para los niños y niñas locales  los domingos,  cuando las escuelas están cerradas. Ellos tienen diferentes  edades, y se ayudan a estudiar y jugar.
Pienso que esto  hace crecer la solidaridad entre ellos.
Los temas que aprenden  son  amplios, por ejemplo, ¿dónde está Cajamarca en Perú?;  Género y LGBT, entre otros.

Sentí la fuerza de los niños y niñas a través de esta entrevista. Ellos viven en una situación de pobreza, pero no dan  excusas.
Hay niños y niñas que viven mirando la realidad y expandiendo sus posibilidades. Ellos trabajan y aprenden.

Liz sueña ser partera, Daniel quiere tener trabajo  en comunicación, e Isaías estudia Psicología y canta Rap.

***

Posdata…

En la tarde del tercer día de esta entrevista, toda la gente desapareció de las calles. Las tiendas estuvieron cerradas, los ambulantes no estuvieron, y los taxis no corrieron nada.
Era el último día de la “Copa América del fútbol”, y el partido era entre Perú y Brasil.
Parecía que todas las personas apoyaban a Perú mirando la televisión o escuchando el radio en la casa.
Yo sabía que el futbol era un deporte muy importante para los peruanos.

La gente gritaba:  ¡Arriba Perú!

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